El programa está diseñado para brindar herramientas de cuestionamiento sobre la articulación y legitimación de la masculinidad desde las instituciones educativas, así como la problematización de la trasmisión de saberes androcéntricos que posicionan a los varones como símbolos de poder frente a las relaciones pares y otras identidades, sentando las bases del necesario trabajo con los hombres desde la perspectiva de género.